martes, 9 de abril de 2013

La Isla de las Flores.




El cortometraje del brasilero Jorge Furtado La isla de las flores (1989) propone una visión del hambre y la injusticia social en América Latina, específicamente en su lugar de nacimiento, el estado de Río Grande del Sur. Con la sucesión casi mecánica de imágenes y definiciones, le pregunta al público por la libertad, por esa relación entre sujetos y condiciones materiales de vida: ¿Dónde está la obra del Hombre cuando prima el mercado? ¿Cómo pensar el mundo como un lugar justo cuando las lógicas parecen trocadas?

A partir de estas preguntas, me interesa mucho rastrear las fuentes de las imágenes que vemos: son pinturas de Bruegel y Miguel Ángel, dibujos de Da Vinci, registros de video sobre bombas atómicas o campos de concentración, fotografías de pirámides y columnas, gráficos de naturaleza y taxonomía. Esto me importa porque tal vez la crítica más profunda no es la pobreza ni las diferencias sociales exageradas sino aquellas formas que el hombre ha inventado para disfrazar/desplazar/distraer su miseria. Hablo de las ciencias, las artes, la burocracia, la geografía, la tecnología y más. Así, queda en la mente algo doloroso a causa de la estructura del corto: la terca repetición de una lógica de conceptos y relaciones de ideas sólo nos arroja a lo ilógico de la situación humana que, dado que es la misma hace tantos siglos, ya parece esencial y no accidental.

No hay comentarios:

Publicar un comentario